LITERATUYA  escribo porque escribo y porque tú

REVISTA DE LITERATURA

 

 Revista de Literatura » Relatos » Collage con merengue  

COLLAGE CON MERENGUE
de Remei Romanos

La mulata se quito la ropa. Hijo de puta, con tus dólares y tu prepotencia, pero que gordo estas, hijo de puta. Se acercó al gringo, con sus andares felinos y tiernos. Olía a dinero, a exceso de comida y ella, que pasaba hambre tres veces por semana, podía certificar que el exceso de comida tenia olor, era una experta en detectarlo. El aliento a wisqui ya la mareaba, y recordó a José con ese sabor a ron antillano que ella adoraba. Un beso provocaba borrachera. Se comió su asco, y penso en Toni el pequeño Toni. Su sonrisa fingida tenia una gran sinceridad. Merengue, O.K. mister, tengo unas cintas, claro, ya recuerdo el que le gusta, siempre las llevo encima, va con el precio. No problem, mister, no problem, bailamos. Sí, bailo bien, verdad? Nacemos bailando y luego aprendemos a putear para ustedes, para los del norte, los gringitos obesos, con esposas que no les comprenden y exesposas que los esquilman, ya sé, ya sé, la suya es una historia muy repetida, amigo. Un poco provocativa, dice?, no amo, nada contestataria, a su servicio, como siempre. Es un discurso revolucionario?, por Dios, que me cuenta? Yo no sé nada de política puede bien creerlo. Que somos un pueblo libre? O.K., O.K, pero a partir de su libertad empieza la nuestra y la suya es tan grande que la nuestra se achica hasta lo imposible. Si será mejor que baile yo sola, usted se cansa, no sigue el ritmo, jadea. Verlo desnudo agitando esa montaña de grasa que tiene por cuerpo me recuerdo mucha a una foca enferma. Esta viejo y cansado, amor. Viene a Puerto Rico a olvidarlo, verdad?. El tiempo corre, no lo olvide, yo le enseño mi cuerpo, bailo para usted y luego si es capaz.... oh, claro, claro, faltaría mas, es usted muy hombre. Ya he visto a través del espejo como se afanaba con la pastilla, cualquier día tendrán una erección hasta las momias egipcias, la farmacia lo soluciona todo. Ahora empiece a enseñarme su carterita, llena de esos papeles firmados por su Banco, el Banco mundial, que se acercan Pascuas y mi Toni quiere unos patines, de esos tan fantásticos para saltar por los bancos de la alameda, para fardar un poco con los amigos, para maravillar a las guayabitas. Luego si sobra lo llevo a un MacDonalds que le encanta. Coño, hay que ver como nos habéis colonizado, eh?, después de jodernoslo todo, abrís vuestros negocios de mierda y andamos como de fiesta el día que podemos entrar en uno de ello a beber vuestra Coca-cola, a comer ese desperdicio que llamáis comida... pero bueno que sabe el chiquilín de todo esto, tarde será cuando comprenda, si llega a entender.

Ni con agua bendita lograré quitarme esta aprensión que siendo en la piel cuando sus manos, sudadas, siempre sudadas, trémulas como de buey viejo me manosean el cuerpo. Nadie sabe, nadie puede saber como ensucia el asco.

Joder, joder, joder.... no te me pongas llorón, gringo. Que te ocurre, es el merengue?. Ah! recuerdas a la gringa que se fue?, puede que también sintiese asco, fíjate las mujeres gringas o no en eso del asco nos parecemos. Mejor cambiamos de ritmo, O.K.?

Así, vamos a trabajar, para eso he venido. Tiéndete a mi lado, si suavecito, no te pongas temblón, ya me subo yo, no estas tu para equilibrios, viejo penco. El entusiasmo es gratuito sabes?, me cuesta un esfuerzo pero cierro los ojos y veo a mi José, su cuerpo de bronce oscuro, sus brazos sin final enlazándome, su boca de ron y canela. Me da resaca amarlo. Imagino su olor, su peso, sus manos, pero no puedo abrir los ojos porque el gringo repugnante en el que estoy montada no resiste la fantasía. Son las seis y este tío no se corre, apenas una erección y cae en picado y no será que no se esfuerce, resuella como un animal, ganas me dan de enviarlo a casa. Vamos mister, busque a esa gringita que se fue, vuelva al home, haga un esfuerzo mejore su imagen, mejore usted en lo que pueda y abra la cartera, quizás la girl acabara aceptando, ya sabe las mujeres en eso del dinero, hágale el amor sin desmesura, que no esta usted para sofocos.

Y otra vez con la música!, pero cree usted que con el ritmo va a poder?, si además le pone triste. Tendrá que abonar otros veinte, amor, bien así me gusta, veinticinco. Toni ya tiene sus patines y una tarde de merienda. Una horita no mas mister, que una es ama de casa y madre, bah! para que contarle. Con otros veinte me llega para unas medias y algo para José, no excesivo, que enseguida sospecha y cuando se pone oscuro las cosas no andan bien entre nosotros. Es celoso el machito, sabe y presiente, pero calla por el niño y también porque el dispone de plata. Sabe que en el vecindario nadie ha visto nada, que soy discreta, solo voy al hotel cuando me llaman y en horas de compra, por decirlo fino. Saber, saber solo lo sabe ella y ese dolor que a veces le asalta el alma y la retuerce por dentro, hecho de asco y de rabia. Le gustaría bailar solo para José, comprar cosas a Toni, hacer un viaje al frío. La nieve la conoce por postales y que daría ella por un abrigo de pieles y un paisaje nevado!. Otra pastilla, mister?, no me abuses que no quiero problemas. Bueno, esta vez culminas o me marcho, pero antes otros veinte, a ti te esperan tus business y a mi la cocina. Que te blanqueas, joder! Que ocurre en tu cara?. La madre que te parió no vas a morirte debajo mío y empalmado, eh?. Ahora tienes la cara rojo-langosta, antes blanco-cadaver, coño tu hoy me la juegas, eh?. Tenia que ocurrirme algún día que alguien me reventará debajo con toda su grasa, su alcohol, sus dólares de mierda y tanta pastilla para enderezar canutos viejos.

Calma mulata, calma, deja de temblar, este tío esta frito, no puedes hacer nada. Vestirte, primero vestirte, luego recoger lo que es tuyo y bien tuyo. Creo que no me ha visto llegar ni el conserje, estaba hablando con otra que hace habitaciones. Cerdo del demonio aun no estas frío y ya te descompones, que peste desprendes!. Al final se ha corrido, si pero de mierda, buena dejaras la cama hijo de tu madre. Huellas, hay que intentar limpiar las huellas. Eso es difícil he andado por todas partes, la gramola, el bar, la cama, el baño, la silla. Ahora el dinero con cuidado de no dejar recuerdos. Guau! dinero tenias viejo verde. Mil dólares, será difícil esconderlos, pero bien administrados me dejen libre de trabajo casi un año y ..... no será mucho?, ni se notara pierdo la cuenta de los billetes que tiene el ricachón!. Las siete y media, José llega a las ocho, tengo media hora hasta casa a buen paso. Ahora hay que andar con tiendo, que nadie me vea salir. No quiero complicaciones y aun así no se me quitara el miedo en días.

Dos noches mas tarde cenaron papas solas, no fuera a darle la sospecha a José y a ponerse oscuro. Bajaron a la playa a escuchar música y de bailoteo. El la apretó entre sus brazos y movió el cuerpo como solo sabe un portorriqueño. Pedro desde la terraza les dio la noticia: que han encontrado muerto en su hotel a un mister, no, no fue asesinato. Ataque al corazón. Había desaparecido su cartera, lo identificaron en recepción. Se apretó a José, a su cuerpo de bronce, se aferro a su boca y pidió un ron.

© Remei Romanos


Cronopios | Informes | Relatos | Poemas | Juegos | Otras Literaturas

diseño de páginas web
 diseño web | retiros yoga | promoción web
 
© Literatuya